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miércoles, 30 de octubre de 2013

Recorriendo Australia (3/4): Sydney

El lunes nos levantamos "temprano" y nos fuimos en tren a la mega ciudad de Sydney. El tren tardó una hora. Nos bajamos en "Central Station"), un poco antes de lo que teníamos pensado ya que se podía considerar la hora de la comida australiana y por ahí nos recomendaron chinatown con platos asiáticos muy baratos. Después de dar unas vueltecitas por la zona, nos quedamos en un restaurante que vendían "Dumplings" (una especie de pasta hervida rellena de carne) a buen precio, y nos compramos el plato que venían 16 por 9 dólares. Con eso ya comimos los 2. 


De ahí continuamos hacia la parte principal, pero por el camino visitamos el momento de los caídos en la guerra, alguna iglesia y los jardines botánicos.



Al llegar al final del jardín botánico las vistas desde allí de la opera con el puente de fondo son espectaculares!! Nos quedamos un rato allí para refrescarnos y apreciar las vistas. 


Luego continuamos el camino bordeando el agua hasta la opera. Hay que decir que el edificio es mucho más bonito desde lejos que desde cerca. Como el precio para entrar nos pareció desmesurado, solo nos conformarnos con las vistas que tampoco eran espectaculares porque aun teníamos la niebla de los incendios. 



A partir de ahí paseamos por el puerto y nos quedamos con ganas de coger un ferri para sacarle fotos desde el agua, ya que es algo que nos recomendaron. Pero ya empezábamos a estar cansados y con la visibilidad reducía no queríamos arriesgarnos a tener una desilusión. Después caminamos un poco por el barrio "The Rocket", que es el más antiguo del continente. Dicen que es el que más se parece a Europa porque fue el primer asentamiento europeo. Ahí aprovechamos para subir al museo moderno y mirar las vistas desde la cafetería del último piso que nos habían recomendado Carlos y Carmen. 



Ya prácticamente sin más ganas de ver nada, nos volvimos caminando por las calles más importantes. Entramos en alguna que otra tienda y pasamos por delante del consulado de España. Paseamos también por "Darling Habour" que vendría a ser el puerto del amor, y nos volvimos para "Central Station". Cenar un arroz con pato y cerdo que ya le habíamos echado el ojo previamente a la hora de comer, y un postre asiático. Después de la cena tomamos de nuevo el tren para la caravana.




martes, 29 de octubre de 2013

Recorriedo Australia (2/4): Cuevas y Camberra

Al día siguiente no podíamos entretenernos mucho en el lago porque aun nos quedaban unos cuantos kilómetros para el destino. Al que le teníamos muchas ganas ya que Leila nos facilito información para que nos vayamos haciendo la idea. Sabíamos que las cuevas estaban en el parque (pero nadie nos dijo que el parque tenía como 400 km de largo), entonces vimos que decían que estaban cerca de un pueblo llamado Tumut, así que al llegar al pueblo nos detuvimos en información de turismo y pedimos recomendaciones para hacer turismo por la zona solo en caso de que no llegáramos a las cuevas a una hora decente. 


Eran las 12 y teníamos una hora aun de viaje. Lo de cerca eran 75 km en zona de montaña, ósea al lado... Pasamos por un súper para comprar algo que echar en las barbacoas eléctricas que nos dijeron que habían en las cuevas, y después de discutir si íbamos a las cuevas ese día o el siguiente, nos tiramos a la piscina y fuimos. Llegamos con 15 min de sobra antes de una de las visitas guiadas a una cueva, y dado que ya había pasado más de medio día, solo nos dio tiempo a visitar 2 de las 3 cuevas mas importantes. Bueno de las cuevas no tenemos mucho comentario y lamentamos que las fotos no reflejen lo que realmente vimos. Con todas las cuevas que visitamos (unas mas lindas que otras) sin duda estas fueron las más "antiguas" que hemos visitado. Las cantidades de estalactitas, estalagmitas y columnas que había eran impresionantes, y dado a que solo crecen un centímetro cada 100 años, hay columnas de más de 1 millón de años!! En la zona de las cuevas había serpientes venenosas y tuvimos la "suerte" de ver una desde el coche.  









Al terminar las excusiones nos fuimos a la piscina termal de la que tanto habíamos leído, para encontrarnos con la desilusión que la piscina era exterior, y a pesar de que estaba a una temperatura aceptable, no era ni mucho menos lo que nosotros consideramos termal. 


Un fallo que tuvimos ese día era que las barbacoas no eran electicas como nos informaron, así que tuvimos que improvisar y de camino a Camberra pasamos por un McDonalds para cenar algo (menos mal que la comida basura esa por todos lados, sino nos hubiéramos quedado sin cenar). Ese día ya las vistas no fueron tan claras porque el humo del incendio de Sydney comenzó a "jodernos" el paisaje.  Y eso fue solo el comienzo porque no solo que a medida que nos íbamos acercando a Sydney vivíamos con una "niebla" de humo constante, sino que también tuvimos que cambiar nuestro recorrido. No solo no pudimos ver las Blue Mountains (que fue la zona más afectada) sino que encima tuvimos que adelantar el viaje de vuelta a Brisbane un día por probabilidad de cortes en las carreteras. En fin... volviendo al viaje, esa noche la pasamos tranquilamente en una área de descanso a unos 50km de Camberra.


Al día siguiente la llegada a la gran capital fue fácil, pero si te descuidas te la pasas sin darte cuenta. Y no digo que sea muy pequeña, digo que no hay nada. Ni te das cuenta de que sea una ciudad. Hay que darles un merito por la construcción de las calles, ya que se apañaron para hacerlas complicadas pero bonitas. 


Pero esperábamos ver un poco mas de edificios o algo al menos... con decir que no encontramos ni una oficina de turismo.... Como era domingo la gente paseaba por el costado del río haciendo deporte y nosotros paseamos un poco por aquella zona. 


De camino a la zona parlamentaria encontramos una exposición de autos de época y pasamos a mirarlos. Algunos eran de 1915 (yo ni sabía que en aquella época existieran los coches). Como conclusión, los coches estaban muy bien cuidados y con un motor muy simple, igualitos a los de ahora... jajaja. Además tuvimos suerte y vimos también un baile antiguo de esos que solo vemos en la películas.... 





Después de dar más vueltas en la ciudad (que es lo mas fácil con sus calles en círculos), nos paramos en el monumento memorial de la guerra con la suerte que en 5 minutos había una guía gratis por el edificio. Pensábamos que era un recorrido corto, pero la guía duro unas 2 horas (y eso que no pudimos quedarnos para los videos explicativos del final). 


Como se nos hacia tarde nos pusimos en marcha dirección Sydney a pasar la noche donde habíamos reservado por airbnb una caravana en la parte trasera de una casa. Al llegar nos pegamos un buen baño de inmersión a temperatura caliente en su mega bañadera/jacuzzi.

Recorriendo Australia (1/4): El norte de victoria

Se terminó la granja! Como mis amigas dicen, seguramente en un futuro veré esta época con mucho cariño. Pero por ahora solo puedo festejar que se termino el recoger naranjas, el vivir en zona camping, el calor que comenzaba y sobretodo esa magnífica fauna. Que muchos decían que soy exagerada al dejar de trabajar porque tenía que compartir la zona con las hormigas, pero como pueden ver en la foto algunas hormigas son más grandes que las uñas de Helios. Obviamente estas no estaban donde estábamos nosotros. Sino ya les digo yo que poco hubiésemos durado en aquella zona. Como anécdota, uno de los últimos días, volviendo al prefabricado nos encontramos un canguro perdido por nuestra zona... y nosotros que creíamos que por allí no había. Claramente ahora entendemos cuando dicen que hay sobrepoblación y tuvimos mucha suerte de no atropellar ninguno en todo el camino (aunque no podamos decir lo mismo de los coches que venían delante, ya que vimos muchos muertos al lado de la carretera).
Nosotros el miércoles trabajamos muy poquito y nos dedicamos por la tarde a empezar a empaquetar todo en el coche. Lo que parecía una tarea fácil nos llevó toda la tarde y tiempo de la mañana.... (¿cuántas cosas se pueden acumular en 3 meses? y pensar que aún tenemos la mitad de cosas esperando en Brisbane). El tiempo al salir no era muy prometedor, pero tuvimos mucha suerte porque así no hizo calor en el camino (nuestro coche no tiene aire acondicionado) y al llegar a nuestro principal destino ya estaba el cielo despejado. Lo mas difícil de la despedía fue dejar a los gatos atrás ya que como son muy listos y sabían que nos íbamos se subían en el coche para que no los dejemos en la granja solos. Esperamos de corazón o volver a verlos o por lo menos que les den tanto amor a los siguientes "pickers" (recolectores) porque sin duda fueron lo mejor de la granja.



Siguiendo los consejos de Carmen, continuamos por la frontera entre Victoria y New South Wales hasta un pueblo llamado Benalla. En realidad nos dirigíamos a Glenrowan, pero este pueblo estaba al lado y al ser más grande creíamos que la información de turismo iba a ser mejor. El pueblo tiene un rio (como la mayoría) pero al costado del rio tiene cosas interesantes. Concretamente a nosotros nos llamo la atención una estructura preciosa de color ladrillo, al estilo mosaico y luego descubrimos que era "al estilo español". 



El hombre de la información de turismo fue muy servicial y eficiente y no solo nos recomendó muchas actividades dentro y fuera del pueblo sino que nos contó un poco la historia del pueblo y los acontecimientos que ocurrieron en él. Fue como una guía gratuita de la historia del pueblo y de los personajes que vivieron en él, como es el caso de un ladrón muy conocido y un médico que participó en la guerra y ayudo a mucha gente. Como ya era más o menos la hora de la comida antes de empezar el recorrido, nos fuimos a un Fish and chips y mientras comíamos nos organizamos al máximo los planes. Vimos los jardines botánicos con el monumento al médico antes mencionado, el reloj de sol (que marcaba nuestra hora exacta, pero no tiene en cuenta los cambios de horario (hacía poco nos habíamos dado cuenta que en Septiembre en algunas provincias adelantaron una hora). 




Al terminar, nos pusimos en marcha para el King Valley. Concretamente pasamos por un pueblo llamado Whitfield y vimos bonitas vistas durante todo el camino que nos dejaron sin habla, eso sin mencionar que cuando llegamos al mirador nos tocó quedarnos un par de minutos pensando y admirando la dimensiones de este país... La verdad que en el mirador se pueden apreciar una de las mejores vistas que hemos visto con paisaje a otros parques nacionales a las afueras de una explanada verde e inmensa. 



Como el camino de ida nos fue tan bien y no estaba casi marcado en el GPS, decidimos arriesgarnos de una manera parecida para continuar camino. Pero a mitad de camino ya no nos parecía tan buena idea cuando leímos un cartel que el camino solo podía ser pasado por 4x4 (y ese día había llovido un poquito). Pero a pesar de los nervios de Geraldine, Helios condujo perfectamente y llegamos al lago del final del camino, teniendo la suerte de que los paisajes fueron salvajes vimos algún que otro animalito que no habíamos visto hasta entonces. Al llegar al lago Bufallo, la carretera ya estaba en perfecto estado y además como se estaba haciendo de noche no nos entretuvimos mucho y nos fuimos al pueblo más cercano a comprar algo para cenar y a seguir camino. Dormimos en el coche a unos 30 km de nuestro siguiente destino.


Por la mañana un policía se acerco a preguntarnos si estábamos bien, si habíamos pasada la noche en el coche y a comprobar los datos. Por lo demás, la noche fue muy fría (por estar en medio de las montañas), nos molesto la luz de la luna y de los coches que pasaban (pero todo esto sirvió para que las noches siguientes no pasáramos por los mismo errores y ya dormimos muchísimo mejor). La mujer de la información de turismo de Bright no tenía mucha chispa y por eso decidir lo siguiente que queríamos ver con tan poco tiempo fue una decisión complicada. Finalmente nos pusimos en marcha al pueblo de Mount Beauty por un camino de montaña con algunas vistas panorámicas. 


El pueblo de Mount Beauty es bonito por naturaleza, está situado en un valle verde rodeado de parques naturales y montañas, entre ellas el monte Bogong que es el más alto de toda la provincia de Victoria (bueno no se hagan ilusiones que era solo de 1986 m.) a esta zona la llaman los Alpes australianos y sí que es verdad que también es la zona de sky en invierno.  Después de pasar por la información de turismo y conseguir unos buenos recorridos para hacer nos dirigíamos aun mas lejos a la punta de una de las montañas en dirección a Falls Creek. El pueblo fue colocado ahí por unos europeos que trabajan en la central hidráulica que decidieron que era una buena zona para esquiar. De camino nos acercamos a unas cascadas que fueron redescubiertas hace diez años después del macro incendio que aun dejó huella en el paisaje. 


En la punta de la montaña nos acercamos al lago y comenzamos un recorrido de una hora (o un poco mas) hasta el punto panorámico. 



Como no teníamos mate para tomar mientras apreciábamos mas vistas y que aun hacia un poco de aire frio, no nos quedamos mucho tiempo y comenzamos el descenso de la montaña. Antes de volver a Bright pasamos por un pueblo llamado como la montaña, Bogong (y le llamamos pueblo aunque no hayamos visto más de 10 casas....), lamentamos no tener mucho más tiempo para hacer un paseo por el lado del lago y de la presa. 


En Mont Beauty paseamos un poco por el costado del rio y comimos un fish and chips en un local suizo. 


Luego, antes de que cerraran los viñedos, pasamos por uno a hacer una degustación y compramos una botella, y ya practicante para acabar el día redondo nos quedaba ver las vistas desde el "Horn" (el pico más alto) del Monte Buffalo. 


De camino pasamos por unas cascadas así que como teníamos tiempo antes de que anochezca hicimos el recorrido para verlas.


Como era la hora del crepúsculo había muchos más animales que durante el día y teníamos que tener cuidado con el coche de no atropellar a esos possiums y liebres o conejitos. Al llegar al "Horn" las vistas te dejaban sin habla y tuvimos mucha suerte que la visibilidad era perfecta y podíamos ver por ejemplo las montañas que iríamos a visitar al día siguiente (diría yo que a unos 300km). Nos hubiésemos quedado en la montaña a ver el anochecer si o fuera que no queríamos hacer los 40 kilómetros de montaña con toda esa fauna a oscuras. 




En total este día nos desviamos unos 300km del camino a Brisbane, pero visitar estos pueblos claramente valió la pena ya que son unos pueblos de montaña bien verdes y bonitos con magnificas vistas. Esa noche en lugar de llegar al parque nacional de Kosiousko como teníamos planeados, pasamos la noche a 200 km en una lago precioso. No solo valió la pena porque al levántanos teníamos unas vistas increíbles, sino porque el lugar fue súper tranquilo, nada frio y con un sonido de olas relajante. 


(Advertencia este viaje de 2.700km desde la granja a Brisbane esta divida en 4 entradas porque se que muchos de ustedes no tiene " a cup of relaxing " café con leche para leerlo todo de golpe)