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sábado, 27 de junio de 2015

Japón: (2/2) Zona sur y oste

Día 4 Shibuya

Este domingo, aunque con mal tiempo, lo dedicamos a Shibuya . Para empezar nos acercamos al cruce mas importante que tiene Japón, donde no sé cuantos miles de personas lo cruzan al día, pero muchos, y a pesar de ser fin de semana estaba bastante llenito.


Como el día no acompañaba nos metimos a comer a un restaurante (como verán nos decidamos a comer todo el rato). La verdad que fue una buena elección ya que conseguimos unos noodels muy ricos y a buen precio. Además este sitio tenia Giozas para llevar súper baratas y con ello matamos 2 cenas de un tiro.


Después de recorrer tiendas y ver los alrededores un poco, nos pusimos a caminar hacia el norte donde había un parque importante. En este había un bonito templo japonés donde mucha gente peregrina para pedir deseos.





Para terminar el día paseamos por Takeshita street. En esta calle venden todo tipo de accesorios, y lo que más nos gustó a nosotros son los miles de locales que vendían crepes de mil sabores diferente. Algunos de ellos tenían mas de 100 modelos. Después de buscar cual era el que más nos convencía optamos por uno de fresas con nata, cheescake y helado. Delicioso!!!




Día 5 Shinjuku

Otro día que amaneció nublado. Aun así, no perdimos las energías, y a pesar que nos pusimos en marcha tarde llegamos a nuestro destino: Shinjuku. Al salir del tren optamos por recorrer la zona de los edificios altos. El primero que fuimos fue el del gobierno que tiene un mirador gratuito en una de las plantas superiores. Aquí encontramos nuestra primera oficina de turismo, y es que solo existen 3 en todo Tokio. Hemos conseguido una guía en español, mucho mejor que la de lonely planet ya que tiene fotitos en color y es más concreta y mejor organizada. Al salir, nos paseamos por el central park, miramos otros edificios que recomienda nuestra nueva guía, y nos perdimos por las calles comerciales al otro lado de la estación. Para comer, después de recorrer muchas calles encontramos unas bolas fritas que llevábamos tiempo intentando comer. Son una especie de croquetas de vegetales con trozos de pulpo por dentro y están de muerte.






Después intentamos entrar en un parque donde hay jardines japoneses, británicos y franceses, pero desafortunadamente no pudimos entrar ya que los lunes cierran.

Para terminar el día nos fuimos en metro al Tokio tower. Recorrimos un templo que había por la zona los e hicimos fotos con la torre. Después de muchos días pateando la ciudad, dimos por concluida la zona y nos volvimos para casa a descansar que al día siguiente tocaba cambiar de casa.





Día 6 Tamachi station y para abajo.

Este día nos lo tomamos con más calma de lo normal, no sabíamos muy bien si nuestra nueva casas nos iba a gustar, y por eso hemos aprovechado en la anterior tanto como pudimos. Luego, al llegar a nuestra nueva casa más céntrica y más cara, hemos paseado por la zona. Buscamos templos y jardines (el primer jardín que nos gustó de verdad). También nos fuimos a ver las casas flotantes y ya muy cansados nos volvimos para casa que al día siguiente nos esperaba la excursión al Mt Fuji!!!








Día 7 Monte Fuji y alrededores.

Pactamos con nuestro primer anfitrión un precio para que nos llevase al monte, y quedamos muy contentos. Si íbamos en tren nos salía alrededor de $100, y con él conseguimos que por $120 nos fuera a buscar y se estuviera todo el día con nosotros. La verdad que viendo todo lo que ha pagado en peajes, gasolina y entradas, no creemos que le haya salido muy rentable, pero para nosotros fue una experiencia única, y él también aprovechó para comprar regalos a su familia. Primero nos llevó a un lago en el que se podía "ver" el monte junto al lago Yamanako. Digo "ver" porque para eso hay que tener mucha suerte. A nosotros nos salió un día totalmente despejado, pero aun así, gran parte de la montaña estaba cubierta de nubes.





Luego fuimos al pueblo de Oshino, y este sin duda fue lo mejor del día. Un pueblo súper precioso, donde probamos un montón de comida típica y súper bien de precio, incluyendo unos udon (fideos gruesos) en un restaurante por 3 dólares! Este pueblo, es característico por la pureza de sus aguas y es verdad que estaba muy transparente y fría.









Luego ya nos llevó al monte, y como era de esperar, estábamos a 2300 metros encerrados en una nube, es decir, que poco pudimos ver de vistas ni la copa del monte. La montaña se divide en 10 estaciones de las cuales solo se puede acceder en coche hasta la 5a. El resto hay que hacerlo caminando y te lleva unas 5 horas. Como nosotros no teníamos ni tiempo, ni la ropa adecuada, nos conformamos con pasear por allí y dejar el ascenso para otro viaje.






Como anécdota, decir que en el camino hay una zona donde han puesto una secuencia de bandas sonoras en la carretera que suenan como una canción tradicional del Mont Fuji. Como nunca habíamos visto una canción grabada en el suelo, nuestro conductor ha pasado 2 veces por allí, y así pudimos hacerle un vídeo.

Al llegar de noche a Tokio, nos acercó a la torre de Tokio para que pudiéramos verla iluminada.



Día 8 de camino a casa

Es raro cuando después de unas lindas vacaciones, volver a casa, y esta que consideras tu casa porque llevamos viviendo aquí año y medio, dejará de ser nuestra casa dentro de un mes.

Este día, para ajustar los gastos y no tener que retirar más dinero del cajero, nos quedarnos pelotudeando por nuestra zona, y nos gastamos hasta el último Yen para comida. Asegurándonos de esta manera, de no cometer el error que hicimos en la ida de quedarnos con hambre en el vuelo.

Comentarios finales:

A pesar de haber sido una semana excelente, confirmamos que con 4 días hay mas que se sobras para ver la ciudad. Si bien es enorme y hay miles de cosas para hacer, si no estás en plan compras, con pocos días y el pase del día del metro tienes suficiente.

Es decir, hubiésemos preferido estar menos días en Tokio y visitar otra ciudad. Pero aprendemos de nuestro error y en el futuro visitaremos la otra cara de Japón.

Hemos caminado una media de 8km al día, y por lo tanto aprendimos que calzado es bueno para nuestro mega viaje y cual no.

También comprobamos que nuestra cámara buena no carga con el adaptador que compramos, es decir, que a pesar de habernos quedado sin cámara buena por unos días, ahora estamos preparados para al llegar a otro destino salir a comprar un adaptador especial y más potente para la cámara.

Nos hemos alojado con Airbnb todas las noches, hemos pagado las primeras noches a 9€ por persona, pero luego nos hemos gastado unos 7€ diarios en transporte, es decir, que lo que ahorramos por un lado lo gastamos por el otro. De todos modos, os dejo el Whatsapp de nuestro anfitrión porque estaba a punto de alquilar otros 4 departamentos más. Igual si alguien va os sirve la referencia y os deja un buen precio. John +81 9052021351.

Ha sido nuestra semana capricho y nos hemos gastado con pasajes incluidos 1.130 € entre los 2 en una semana. Digo capricho porque nos hemos gastado en una semana lo que esperamos gastarnos en tres en otros países asiáticos.

Con respecto a la comida, excelente! Hemos probado de todo, y todo nos ha encantado. Nada ha sido picante y todo nos ha gustado. Seguro que no podre decir lo mismo de la comida Thai que tiene fama de picante...


Empieza la cuenta atrás para el viaje de nuestra vida: 38 días!!!!!

viernes, 26 de junio de 2015

Japón (1/2) Tokio zona este

Ya estamos de vuelta!!! A pesar de otras novedades que tenemos para contarles, esta entrada va única y exclusivamente dedicada a Japón!!

Día 1: de Gold Coast hasta Segendai, Tokio.

La idea fue un poco caótica, ya que llevábamos 5 semanas consecutivas con un trabajo extra que no nos dejó tiempo ni de preparar la maleta. Por suerte, la exagerada de Geraldine tenia cosas separadas limpias para el mega viaje y hemos hecho trampa y utilizado cosas de allí, y de paso testear un poco si la ropa es cómoda, adecuada, si es mucha, poca, etc...

El vuelo salió desde el aeropuerto de Gold Coast a eso de las 11 am. es decir, que nos tuvimos que levantar temprano a preparar lo último de la maleta (a lo rápido), e ir directo al parking a dejar el coche. Es la primera vez en mi vida que llego 2 horas antes de la salida del vuelo y pasamos literalmente las 2 horas haciendo papeleo. Si sabemos que cuesta tanto salir del país, nos los pensamos 2 veces.... Después de enseñar documentación, y rellenar varios formularios, nos tocó volar casi 9 horas (sin comida!!).



Esto quiere decir, que a pesar de que llegamos sobre las 19hs a Tokio, no queríamos parar hasta conseguir llegar a la casa. Terminamos almorzando a eso de las 23hs. Como podréis imaginar ese día caímos rendidos, aunque la idea de dormir a lo Japonés, es decir en unos minicolchoncitos sobre el suelo, no era muy apetecible. Cuando hay hambre no hay pan duro...



Día 2: Barrios de Asakusa, Ueno y Akihabara

Al día siguiente, ya con las energías recargadas, nos aseamos, nos comemos unas tostaditas que nos da nuestro anfitrión de desayuno y salimos a la calle. Desgraciadamente nos tocó un día de lloviznas y menos mal que nuestro anfitrión nos prestó su paraguas (aquí comentar que más del 80% de los paraguas japoneses son transparentes, tanto que Geraldine se pregunta si es alguna regla..) Para acostumbrarnos a la City, el primer día escogimos los barrios centrales más cercanos a nuestro alojamiento; y sí, resulta que nuestro apartamento era muy económico, pero nos gastamos mucho tiempo y dinero yendo a la city todos los días...

Empezamos por el barrio de Asakusa, y nada más salir de la estación, ya estábamos enamorados del barrio, con miles de puestecillos de comida tradicional y tés. Como imaginaran Helios babeaba por la comida y Geraldine por las bebidas. Además, hay maquinas expendedoras de bebidas en todas las esquinas y a buen precio. Geraldine estaba en el cielo de los drinks.







Este barrio, además de la calle comercial japonesa, tiene un templo súper antiguo que nos ha dejado con la boca abierta. Fue nuestro primer encuentro con la arquitectura japonesa! Después de pasear y hacer todas las tradiciones de la buena suerte, decidimos ponemos en marcha hacia otro barrio. Como recién empezábamos las vacaciones y teníamos mucho día por delante, nos fuimos caminando hacia el barrio de Ueno. Aquí, aunque fuimos al parque que te recomiendan, la verdad que con un día como el que teníamos nosotros el parque no nos pareció gran cosa, así que decidimos ir caminado hasta el siguiente barrio, Akihabara.



Este barrio tiene como protagonistas miles de tiendas comerciales, en las que nos adentramos intentando conseguir cámaras a buen precio, para descubrir que salen al mismo precio que en internet, así que no compramos nada. También es el barrio Manga y Anime por excelencia, así que de tanto en tanto entrabamos en alguna tienda a ver muñequitas, cartas, posters, etc... También nos pasamos por los recreativos y maquinas de cazar peluches, aunque no hubo suerte. Además conocimos el Pachinko, que es la versión japonesa de las tragaperras. Estos locales tienen el sonido tan fuerte que realmente es insoportable estarse allí, y por lo que nos contó nuestro anfitrión los japoneses tienen cultura de jugar mucho a estas máquinas, así que la mayoría deben de quedarse sordos.


Día 3: Mercado de Tsukiji, Monja Street y Jardín imperial

Después de todo el paripé para estar listos y cargar los mapas en los móviles, nos fuimos a la parada de Tsukiji. Aquí es donde se encuentra el mercado de pescado más famoso de Tokyo, y muchos turistas viene a las 5 de la mañana a ver la subasta del atunes. Nosotros llegamos sobre las 11 así que nos conformamos con pasear por sus calles y probar todo tipo de comida. Nos compramos 2 escalopas muy grandes y una ostra inmensa (tanta radiación nuclear da que pensar...). Después de pasear todo lo que quisimos y mas, nos fuimos al otro lado del puente a un barrio en el que hay una calle donde todos los restaurantes venden "monjas". La verdad que no teníamos ni idea de que se trataba, pero las guías lo recomendaban así que nos decidimos por probar. Después de mucho buscar escogimos un bar que tenían el menú en español, y así por lo menos pudimos saber lo que comíamos. Había muchos tipos, pero se trataba principalmente de verduras con añadidos en una salsa especial, que se cocina en una plancha situada en el centro de la mesa. Finalmente escogimos la del estilo japonés y una mezclada. Esta segunda fue la más ricas y no solo porque la cocinó Helios, sino porque la mezcla de pescado, carnes y verduras nunca falla!.

 




De allí nos fuimos caminando al barrio de Ginza, donde pudimos comprobar que es la zona donde están todas las boutiques de marcas caras. Después de pasear un poco por sus calles, continuamos caminando hasta la estación de Tokio central, y más concretamente hacia los jardines del palacio imperial. Parece mentira que justo en el medio del caos haya tanta tierra verde. Los jardines dejan un poco que desear, quizás porque no estamos en primavera o porque no son jardines japoneses, pero los edificios eran bonitos.







Al terminar, como aun teníamos energías, nos fuimos caminando a Akihabara de nuevo ya que el tren salía directo a casa desde allí. Aprovechamos para callejear las partes que nos faltaron el día anterior, y tuvimos la suerte de encontrar un espacio donde promocionaban una cerveza japonesa. Por 2 dólares por persona nos dieron 2 cervezas a cada uno, y participamos en un juego de cazar noodles (espaguetis asiáticos) con palillos chinos que caían por un tubo de bambú, que posteriormente nos comimos. Fue la anécdota inesperada del día que puso la guinda a nuestra esplendida jornada.