Estos días fueron un poco de locura. El miércoles teníamos planeado visitar 2 coches. Uno un poco grande, automático y que consumía mas gasolina, y otro blanquito, chiquito y que no consumía casi nada de gasolina. Al levantarnos nuestro compañero de piso nos avisó que el grande no podíamos ir a verlo porque se había quedado sin batería. Así que le dijimos al dueño que, cuando lo hiciera funcionar, nos avisase y nos fuimos directo a ver el coche más prometedor de todos. Cuando llegamos miramos el coche, y después de pasar por el primer control, nos dejó subirnos. Así que Helios conduciendo y Geraldine en la parte de atrás comprobando todo, nos fuimos a dar un paseo por la calle arriba y abajo. Mientras tanto nuestro compañero de piso se quedó con el dueño del coche. En ese momento, 4 señores trajeados se acercaron a la casa y preguntaron por él. El dueño nos mandó un mensaje de texto diciendo que eran del ayuntamiento quejándose de que había muchos coches en la calle y que si podíamos llevarnos su coche y volver 10 minutos después. Obviamente nos dio mala espina de que el coche este embargado o robado y nos fuimos pitando de ahí de vuelta a casa, medio "flipando" y medio desilusionados porque realmente nos gustó el coche. Paramos a comer unos "pies" (tartas de carne) típicos de aquí. Enfrente de la tienda había un negocio de venta de coches usados. Nos pasamos a ver que coches había pero eran todos muy caros, le preguntamos cual era el mas baratos y nos dijo que a unos calles había uno que vendía "crapy cars" (coches de mierda). En este sitio de coches de mierda encontramos un Mazda 323 del 92 automático y con aire acondicionado listo para llevar a casa. El hombre que los vende es mecánico así que el se encargaría de todos los papeles de cambio de nombre y de conseguir el certificado necesario (RWC). Así que después de probarlo y ver que funcionaba adecuadamente le pagamos 50 dolares de señal y nos fuimos a casa. Este día era el último que nuestro compañero de piso podía acompañarnos a ver coche porque el jueves se iba a China por 2 semanas. La verdad que fue un alivio conseguir un coche mientras él estaba por aquí porque él conoce mucho más de coches que nosotros. Así supimos que estábamos comprando algo que valía la pena.
Esa tarde también tuvimos una cena en familia ya que de los 4 hermanos, nuestro compañero de piso se va a china el jueves y otro hermano se va a vivir a Seattle (USA) a principios de febrero. Así que era una cena de despedida. Preparamos croquetas (unas de pollo y otras de zanahoria y atún) que tuvieron mucho éxito. Ademas teníamos ensaladas, humus casero, patés, quesos, pizza... Lo pasamos genial.
El jueves la madre nos acompañó a comprar el coche. Firmamos los papeles y pagamos los otros 1.100 dolares restantes y para casa. Por lo poco que conducimos hasta ahora estamos muy contentos con el coche, no es una maravilla pero es suficiente para nuestros propósitos. Por fin estamos motorizados y eso amplia las zonas de búsqueda de trabajo muchísimo. Ademas tiene el punto a favor de que al ser automático casi no tenemos que tocar la palanca de cambio que esta en el lado opuesto al que estuvo siempre para nosotros. Ahora solo nos queda centrarnos por el lado que tenemos que conducir.

No hay comentarios:
Publicar un comentario